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Por qué los alimentos líquidos no te dejan adelgazar

Suponga que ha aumentado de peso a lo largo de los años y no sabe por qué debe fijarse en lo que bebe. 

Los alimentos líquidos es una de las cosas más importantes a tener en cuenta para poder ver resultados al momento de hacer dieta.

La pregunta es: ¿estás bebiendo tus calorías? Si ha aumentado de peso gradualmente y tiene dificultades para perder peso, es probable que esté bebiendo sus calorías.

El problema

Debes saber que el cuerpo necesita energía incluso para sus funciones esenciales, como el crecimiento y la reparación.

Esta energía proviene de los alimentos que comemos (carbohidratos, proteínas, grasas y alcohol), y la energía se mide de dos formas: calorías o kilojulios.

Una caloría equivale a 4,2 kilojulios.

Por lo tanto, cuando consumes bebidas distintas al agua, consumes cantidades significativas de energía.

Una lata de Coca-Cola de 250 ml contiene casi la misma cantidad de energía que una manzana (alrededor de 100 calorías). Esto no parece mucho. Sin embargo, estas bebidas pueden sumarse rápidamente.

Por ejemplo, el consumo de una persona promedio puede ser algo como esto:

  • 2 cafés espresso con leche normales, uno para el desayuno y otro más tarde en la mañana.
  • 1 lata de refresco (375 ml) en el almuerzo.
  • 2 tazas de té con una cucharada de azúcar cada una, una por la tarde y otra después de la cena.
  • 1 batido de proteínas después de la actividad física.
  • 1 copa de vino con la cena.

Así, si sumas todas estas bebidas, obtienes una cantidad superior a las 740 calorías diarias añadidas a los alimentos que consumes.

El hecho de que no te llenen no significa que no te proporcionen energía.

Conciencia

Uno de los principales problemas de beber calorías es que generalmente las consumimos cuando estamos haciendo otra cosa.

De esta forma, no es fácil ser consciente de la cantidad de energía que estás consumiendo.

Tenga en cuenta que la falta de conciencia sobre los alimentos es la razón por la cual muchas personas que tienen estos hábitos de bebida todavía no se dan cuenta de por qué no pueden perder peso.

El escenario es más o menos así:

  • Bebes una coca cola mientras trabajas.
  • Bebes café o chocolate caliente cada vez que te tomas un descanso del trabajo o te encuentras con amigos.
  • Tomas una taza de té helado cada vez que tienes sed.
  • Compras una bebida cada vez que compras tu almuerzo y el vendedor te pregunta con qué bebida vas a acompañar la comida.
  • Tomas una copa de vino mientras preparas la cena.

Control deficiente del apetito

Otro gran problema de beber calorías es que el cuerpo no se siente lleno, por lo que no dejas de consumir otros alimentos y bebidas más tarde durante el día.

Según la investigación, las personas que beben refrescos a diario no necesariamente comen menos. De hecho, en la mayoría de los casos, el consumo de refrescos y otras bebidas similares se asocia a un mayor consumo de alimentos.

El consumo regular de bebidas con alto contenido de azúcar conduce a un control deficiente del azúcar en la sangre debido a una fuerte dosis de azúcar en el cuerpo. Esto a menudo aumenta los antojos y provoca cambios de humor.

Baja densidad de nutrientes

Por otro lado, la mayoría de las bebidas azucaradas contienen muy pocos nutrientes. De esta forma, ofrecen energía pero baja cantidad de fibra, vitaminas y minerales.

En este sentido, no basta con controlar la cantidad de energía que consumimos. También es fundamental conocer el aporte nutricional que nos aporta cada comida.

Lo mejor es omitir las bebidas con alto contenido de azúcar y moderar el consumo de bebidas lácteas como el café con leche o el chocolate caliente para obtener tus necesidades energéticas diarias a partir de alimentos más nutritivos como verduras, frutas, legumbres, frutos secos, semillas, cereales integrales, etc.

Cómo deshacerte de las bebidas que no te ayudan

Lo primero que debe hacer es aumentar su consumo de agua. Muchas veces tomas bebidas altas en calorías simplemente porque tienes sed.

Así, si te aseguras de mantenerte hidratado, eliminarás las razones fisiológicas por las que deseas tomar bebidas azucaradas.

Por otro lado, reduce gradualmente el consumo de bebidas con cafeína durante unas semanas.

Además, asegúrese de comer alimentos ricos en nutrientes. Necesitas recuperar el control sobre tu apetito, y eliminar las bebidas azucaradas de su dieta puede provocar antojos si no estás comiendo bien.

En este sentido, si te saltas comidas o no comes lo suficiente, no será fácil eliminar las bebidas azucaradas de tu dieta.

También es recomendable anotar el número de calorías que te aporta cada bebida que consumes. Al tener una imagen clara, es más fácil reducir su consumo.